En el ministerio de Jesús las mujeres tuvieron participaciones especiales y en muchas de las historias de los Evangelios nos encontramos con ellas, a veces las mismas historias pero narradas con más o menos detalles.
En esta ocasión hay una mujer y es María Magdalena, según el Evangelio de Juan capítulo 20 versículos del 1 al 10 esta mujer fue la primera en ir a la tumba de Jesús y descubrir que estaba VACIA!
“El primer día de la semana, María Magdalena fue de mañana, siendo aún oscuro, al sepulcro; y vio quitada la piedra del sepulcro. Entonces corrió, y fue a Simón Pedro y al otro discípulo, aquel al que amaba Jesús, y les dijo: Se han llevado del sepulcro al Señor, y no sabemos dónde le han puesto.”
Algo más que notamos, muy interesante de esta mujer, es que según el Evangelio de Marcos Capitulo 16 versículo 9, Jesús había echado de ella siete demonios!!.
María Magdalena extrañaba a Jesús, su Maestro!
Él había cambiado su vida, desde que María Magdalena se había encontrado en su caminar por la vida con Jesús fue una mujer diferente!
Él había sanado su corazón, fue liberada, había recibido perdón y salvación.
Jesús la había transformado en un mujer nueva. Ella tenía mucho que agradecerle y por eso dedicó su vida a servirle en su ministerio.
Jesús le había dado un lugar!
En tiempos en donde las mujeres no eran compañía para los hombres, Él se rodeaba de ellas y eran bienvenidas. Desde el principio de Su ministerio, Jesús valoró a las mujeres y las respetó siempre. Ellas formaban parte del hermoso trabajo que Él hacía.
María Magdalena aprovechó cada uno de esos momentos, cada instante con el Maestro, porque cerca de Él, igual que todos los que le seguían, sentía la paz que necesitaba para vivir.
Podemos identificarnos tanto con esta mujer! Al ver como Jesús transformó nuestras vidas y lo sigue haciendo. No tenemos otra manera de agradecerle que rindiendonos a Él entregándole todas nuestras vidas.
Jesús es imprescindible para nosotras, ya no nos imaginamos la vida sin Él.
Algo parecido debió sentir María Magdalena! Ella tuvo el privilegio de ver su cara, tocarlo, hablarle, escuchar su voz y compartir con Él momentos significativos.
Luego de crucificar a Jesús, el día domingo ella se levantó muy temprano con la enorme necesidad de ir donde se encontraban los restos Jesús.
Que privilegio tan grande el de esta mujer! Llegar, ver la piedra del sepulcro removida y mirar y ver que su Maestro no estaba allí.
Mas adelante, desde el versículo 11, María Magdalena continua llorando afuera de la tumba, se preguntaba a dónde habían llevado a Jesús?
Pero luego de ver dos ángeled escuchó una voz muy conocida decir su nombre!
Era su Maestro resucitado! Ella fue la primera en avisar a los demás discípulos que Jesús había resucitado y le había hablado! (Juan 20:18)
Una mujer transformada y agradecida fue María Magdalena!
En Cristo,
Yicell